Luego del escándolo de las fotos de la edición francesa de la revista en enero 2011. En ella, un grupo de chicas de entre 10 y 11 años jugaban a ser más grandes con ropa, maquillaje y accesorios en posturas sensuales.
Desde entonces, la
revista se compromete, a partir del mes de junio, a no volver a
utilizar modelos menores de 16 años o aquellas que parezcan tener
desórdenes alimenticios.
Una apuesta por la imagen sana y proteger la infancia, tal y como publican en ABC. Jonathan Newhouse, presidente de Conde Nast International,
ha dicho este jueves que los editores de la Biblia de la Moda de todo
el mundo quieren que sus revistas reflejen su "compromiso con la salud
de las modelos que aparecen en sus páginas".
Como consecuencia de las críticas recibidas, Carine Roitfeld,
la editora de la revista, se vio obligada a abandonar su cargo. Por lo
tanto, desde Vogue han decidido comprometerse a no trabajar "con modelos
menores de 16 años o que parezcan sufrir desórdenes alimenticios".
Para
lograr su objetivo, pedirán a los agentes que no manden menores a los
castings y comprueben siempre los datos de antemano, así como
estructurar una guía de modelos adultas para que aconsejen a las
jóvenes.
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